Todos tenemos días en los cuales no nos sentimos del todo bien. A veces, acaban convirtiéndose en semanas y esto nos perjudica en nuestras relaciones personales y profesionales. Pero, ¿por qué no probar a meditar?
La rutina y el estrés generado por los problemas a los que nos sometemos en el día a día hace que en ocasiones dejemos a un lado el cuidado a nuestro cuerpo y, sobre todo, a nuestra mente. Por ello, en esta entrada hablaremos de la práctica de mindfulness en Sevilla mientras caminas.
Dedicarle 20 minutos al día a lo largo de una semana será más que suficiente. Empezar adquiriendo esto como un propósito puede ser más que positivo para ti. Busca como lugar aquel en el que te sientas agusto, no importa si es en medio del campo o en plena ciudad. Lo importante es sentirse bien.
Para su realización, deberás permanecer antes de comenzar quieto durante unos minutos. Sentir tu cuerpo, las sensaciones y analizar el ritmo de la respiración. Cuando comiences a andar debes hacerlo a un ritmo suave en un principio.
- Entre las distintas opciones de trayectoria está quienes hacen una línea recta, aquellos que optan por algo más circular o los que realizan una serie de pasos hacia delante o atrás y vuelven al punto de origen.
- La posición debe ser erguida, de pie y con los pies fijados en la tierra para distribuir de forma uniforme el peso corporal.
- Dejar los brazos sueltos es también de gran ayuda.
- Debes caminar a un ritmo estable. Recuerda que puede haber momentos de distracción, pero posteriormente vuelve a centrar tu atención en el presente.
A grandes rasgos este es el tipo de práctica que debes realizar durante una semana para comenzar a ver cómo tu actitud ante la realidad está modificándose. Deja a un lado todos los pensamientos positivos y pon en marcha un cambio en tu vida.